Thursday, March 29, 2007

Será, será...


Un recorte de razón para la sabiduría y el corazón deja de latir en cinco segundos. Las dos almas que antes se anhelaban, ahora sólo se absorben como cobra que atrapa a su presa en un segundo. Las mentes ahora sólo intentan reconvertir lo soñado, lo vivido y lo creado en sueños.
Todo gira al revés...
Será que viven en mundos diferentes, será...
No pueden hacer más, sólo les queda el recuerdo, imagen, y más imágenes. Algo falleció en los mares, pero las olas se llevaron consigo el mensaje que nunca se leyó.
Siempre tan oculto.
Todo gira al revés...
Será que viven en mundos diferentes, será...
Parece aparecer en el aire cuando menos se espera... y todo gira al revés...
Será que viven en mundos diferentes, será...
El acuerdo es aparecer, besar en el momento idóneo, pero nunca se coincide. ¿Por qué?
El miedo, el miedo nos lleva y nos trae. Él es quien nos guía, él es nuestro imán, él...
Quien nos dirige como marionetas, ahora, ya muertas.

Wednesday, March 14, 2007

El resplandor nos espera


No hay señales, y lo que puede rodearte no cambia, aunque continúes andando. Quizás se trate de eso. La lucha en cantidad, ser constante con ello. Sin desnudos, sin girar la cabeza y tampoco sin paradas en la próxima esquina. Sólo se ve una luz, y sí, parece que todos vamos a la misma luz, parece que nos aliamos entre nosotros y nos ahogamos, entonces en tranquilidad. Qué alivio... Bien para el camino no está mal, aunque nunca sabes lo que puede cambiar una compañía. Tampoco es tan malo andar solo. Andamos y creamos constantemente. Andamos, andamos... y esperamos pero andamos, siempre volvemos a andar.
El destino hace un cambio mínimo entre todos. Y a su vez nos cuelga a todos por el mismo costado y nos enreda en la misma pila.
Sólo el resplandor nos separa, y sólo él, en realidad nos espera.

Saturday, March 10, 2007

¿Por qué un delito de conciencia?






En un momento, lo hacemos... y repartimos llantos, tambien ¿por qué no? Corremos también, hasta corrernos. Ahora lo gritamos, lo aireamos y nadie nos señala, ni desprecia. La naturaleza es dulcemente gozosa. Completamos nuestro placer. Lo hacemos en la cama, en el baño, con el amigo, con el amante, sola... Ya no hay señales, sólo un disfrute. La realidad está revuelta y estalla la naturalidad cuando se oye una voz... "Voy a desahogarme... espérame, ahora vengo..." Tan realista como suena. Entre voces, puede escucharse o no, los gemidos. Tan rápido como una bala, y agotador como tan místico e intenso en la nocturnividad... De tantas maneras, tantos colores, y por supuesto, sabores...
Follamos con nosotros mismos con el respeto de cada uno que nos rodea. Y cuando vamos a ello, sentimos cierto misterio, culpabilidad, sentimos como nos pueden mirar, y pensar lo que haremos en un espacio tan íntimo. Aún así, todavía nos creemos malditos. Es la misma sensación que puede atraparte cuando piensas robar.
Pero... nosotros no robamos, ¡nosotros nos masturbamos!

Puzzle


Siempre se descubren más cosas, nuevas cosas. El aprendizaje, la mejor consumición. El día a día nos atrapa y en la noche, en nuestra mente, caen como gotas ansiosas, pinceladas de una comida eterna. A veces tenemos que esperar a probar, otras observar y abordar en el momento preciso, en ocasiones actuamos impulsivamente. Siempre se parte de un deseo, el funcionamiento de la acción mecanicamente inconsciente pensada.

Pero no basta con esto. No. Tampoco podemos olvidar, y una foto, un olor, un sentimiento, a veces se hace tan pequeño...

Recuerdo de un recuerdo, un puzzle. Un gran puzzle. Asustaba el comienzo pero un deseo hizo que en poco tiempo las piezas comenzaran a encajar. El puzzle, las fichas. No sé cuántas son exactamente. Pero se han perdido. Entre tanto humo oscuro, tanto aire frío se habrán descolocado más aún entre ellas... es difícil, muy difícil encontrarlas, más aún encajarlas. Digamos que es un stop paralizado, un stop intermitente, un stop paralítico. No entiende de tiempos, tampoco de sensaciones ni de lugares claros.

He pensado, y sí... me gusta lo inacabado. Me encanta la perfecta imperfección. Sé que poco a poco, y entre un stop, seguido del próximo pause, encontraré, algunas piezas caerán solas, sobre mi mano, sin pensar. Quizás nunca lo acabemos, o quizás sí. No existen problemas...

Mientras permanezca la fuerza, y las ganas de seguir viendo, mirando, observando, hablando... el puzzle seguro, seguro terminará por hacerse solo, aunque le falte una pieza, o dos, o tres... da igual. Me encantará volver a buscar...

Sunday, March 04, 2007

Serena


Se vuelve a despertar, quién sabe porqué. Ni quiero pensarlo, aunque algo en mi interior me diga a gritos. Follar, follar, follar...
Inquietante lo que un sólo amor puede llegar a cometer. Temeroso es más aún cuando las voces y miradas se alían y estalla el efecto mágico, efecto que deslumbra. Excitante el momento de tocar. Deseoso el instante interrumpido. Besar, besar, besar...
Entre tantos cuerpos, curvas, se despierta el punto preciso. Lluvia de fuego y calor en la primera piel. Los ojos se vuelven como objetivos de paparazzis ansiosos, pero la pereza esta vez no se presenta, la serenidad se ha presentado.
Serena por intentar reconocer un amor prohibido, limpio y confidente. Serena por intentar comprender lo que un sólo amor puede agrandar los momentos más simples que se puedan ocupar. Serena, por una larga espera, sin consecuencia alguna. Serena, porque ya no entiende de amores diarios, nocturnos. Serena, por un sólo amor.Serena... por su amor.

Saturday, March 03, 2007

Cruce de aires

Los pasos tienen autor, y entre paso y paso, crítica.
Lavabos mascando perfume caro.
Las niñas vistiendo las nuevas tendencias de Ralph Lauren. Un marido dudando entre las agujas de un Dolcce & Gabbana y un Armani. Qué lujurioso, qué romantico. La chulería en escena, presente con los tacones de Gucci y el aire, respirando Channel Nº 5. El adolescente en posición, rompiendo el paso, mientras su pantalón, marcado por Hilfigher, azota el suelo transparente.
La moda y el rechazo, la moda y la curiosidad.

Los pasos tienen autor, y entre paso y paso, libertad.
Lavabos mordiendo aroma de barrio fino.
Los chicos desvestidos y a medio mudar, curioseando entre un arco iris de faldas desenmarcadas. La mujer, buscando el blanco de su camisa entre las aguas que rodean su casita. Los señores matando espinas de las hojas con el poderoso bastón construido por la propia naturaleza.
La naturalidad bohemia y la libertad, la naturalidad bohemia y el despido.
El estilo no tiene nombre, pero sí dueño.
Un cigarro en la discoteca, qué cool. Un pitillo entre cuevas y agua oscura, qué bohemio. Realmente curioso...
Sin marcas, moderno, bohemio, natural pero con estilo, mucho estilo. Prueba las combinaciones, intercambiar siempre sirvió para aprender. Cruza el aire bohemio con el moderno... cruza, cruza...